Tras la situación a nivel nacional e internacional por el COVID-19, la mayor parte de la población debe mantenerse en cuarentena. Lo que implica estar abastecidos de productos alimenticios necesarios para no salir constantemente a lugares que sean posibles focos de infección.
A la hora de planificar la compra de alimentos para llenar la despensa a largo plazo, es importante considerar sobre todo los alimentos que tengan una vida útil muy amplia y también que sean, en la medida de lo posible, no perecederos.
Otra de las opciones es congelar los alimentos como hortalizas, verduras y frutas e irlas consumiendo paulatinamente, tomando en cuenta el número de integrantes de la familia y sus necesidades específicas.
Según la experta, los grupos de alimentos indispensables en una lista de compra que se realiza con vistas a largo plazo deberían incluir, a nivel general:
- Cereales
- Legumbres
- Verduras y hortalizas
- Frutas y frutos secos
- Carnes
- Mariscos
- Lácteos
- Grasas, aceites y vinagres
- Cafés, tés y especias
- Dulces
Así también, se recomienda no acumular alimentos. Tomando en cuenta a los consumidores más vulnerables, como los ancianos o aquellos con sistemas inmunes comprometidos, porque seguramente pueden necesitar ahora mismo suministros y no encontrarlos.
Otro aspecto muy importante para adaptar a esta cuarentena es el movimiento físico y el hacer ejercicio, esto ayudará a nuestro sistema a estar alerta ante cualquier enfermedad.
Este sin duda es un momento propicio para generar una alimentación más consciente y saludable. Hay que recordar que es importante estar bien nutridos, pero no sobrealimentados.