Para ser dueño de la exitosa saga del cine Star Wars, y los históricos estudios de Lucasfilm, basta con desembolsar cerca de 4.000 millones de dólares, algo que ya hizo Walt Disney el 30 de octubre de 2012, como parte de las adquisiciones que había realizado en los últimos años, que incluyen la compañía de animación Pixar y la editorial de cómics Marvel.
El cineasta George Lucas recibió la millonaria cifra al ser el único dueño de la compañía que fundó en 1971 y que dio vida a la saga cinematográfica de La Guerra de las Galaxias.
Además de la adquisición, Disney presentó la cinta Star Wars: Episodio 7 en 2015 y podría preparar otras dos películas más.
«Lucasfilm refleja la extraordinaria pasión, la visión, y la narración de su fundador, George Lucas», destacó Robert A. Iger, presidente y consejero delegado de Walt Disney. «Esta transacción combina una cartera de clase mundial de contenidos, como Star Wars, con una de las mejores franquicias de entretenimiento familiar de todos los tiempos”, consideró la compañía en un comunicado de aquellos días.
Al darse a conocer la venta, George Lucas dijo que estaba orgulloso de haber sido testigo de cómo Star Wars ha pasado en los últimos 35 años “de una generación a la siguiente” en el gusto de las personas.
«Ahora es el momento para mí de pasar Star Wars a una nueva generación de cineastas. Siempre he creído que Star Wars podría vivir más allá de mí, y pensé que era importante establecer la transición en mi vida”, aseveró el hasta ahora dueño de Lucasfilm que confió en que la saga “vivirá y florecerá” en Disney.
Disney lanzó en 2015 el Episodio 7 luego de que en 2005 se lanzara el último capítulo de esta serie de películas que ha abarrotado las salas de cine durante varias décadas. Además, previó que en los años posteriores serán producidos los episodios 8 y 9, todos bajo la asesoría de George Lucas.