La Gobernación de Chimborazo evalúa sustituir la tradicional palma de cera en el Domingo de Ramos, a propósito de su preservación y conservación, puesto que hace algunos años el Gobierno Nacional a través del Ministerio del Ambiente dispone la reforestación de zonas donde se cultiva esta planta.
En el tradicional Domingo de Ramos, la comunidad católica celebra el inicio de la Semana Santa en todo el mundo. En este día se recuerda la entrada de Jesús a Jerusalén en medio de una multitud que lo recibió con ramos en sus manos.
Los ramos o ramilletes que son bendecidos en el domingo de ramos están elaborados generalmente con palma de cera. Esta planta no solo se encuentra en la categoría de vulnerable, de acuerdo a los criterios internacionales, sino que es el hábitat de dos especies en peligro de extinción: el loro Orejiamarillo y el perico Cachetidorado.
Estas especies se alimentan de los frutos de estas plantas y construyen sus nidos en los agujeros de las palmas más envejecidas, por lo que, sin la palma de cera, el loro Orejiamarillo y el perico Cachetidorado podrían desaparecer.
Con la campaña “Tradición y conservación van de la mano”, el Ministerio del Ambiente busca concienciar a la ciudadanía acerca de la importancia de la conservación de la Palma de Cera por ser el hábitat del Loro Orejiamarillo y el Perico Cachetidorado que se encuentran en peligro de extinción, invitando a realizar los tradicionales ramos con materiales alternativos.
Este fue el motivo de la reunión mantenida entre Germánico Guerrero, intendente General de Policía de Chimborazo, representantes de la Diócesis de Riobamba y el Ministerio del Ambiente.
Totora, laurel, maíz, sigse, paja, trigo y cebada, son algunas de las alternativas para la elaboración de los tradicionales ramos para inicio de Semana Santa.
Este Domingo de Ramos, se debe celebrar la tradición, cuidando la naturaleza.
