La Alcaldía de Quito expidió este sábado una ordenanza que prohíbe los espectáculos donde haya sufrimiento de animales, lo que sería una estocada casi mortal a la fiesta brava en la ciudad, donde defensores de la tauromaquia intentan revertir legalmente la prohibición de corridas con muerte del animal.
En el apartado «De los animales destinados al entrenamiento, el artículo 46 de la ordenanza reza: «De peleas o combates públicos o privados. Queda expresamente prohibido todo tipo de espectáculos públicos o privados que impliquen sufrimiento, maltrato, muerte o cualquier tipo de atentado al bienestar animal».
Asimismo, «cualquier tipo de espectáculo que involucre combates entre animales o entre animales y personas, así como el entrenamiento de animales para estos fines en el Distrito Metropolitano de Quito».
Con ello, el Municipio de Quito mantiene su política animalista en momentos en que se mantiene un litigio en la Corte Constitucional de Ecuador en la que los amantes de los toros pretenden que prevalezca lo que llaman «derecho a la cultura».